Enfrentar un cargo por manejar en estado de ebriedad (DUI/DWI) en Arkansas genera incertidumbre y preocupación. Conducir bajo la influencia del alcohol o las drogas es un asunto serio, y las leyes de Arkansas imponen sanciones severas en estos casos. A continuación, ofrecemos orientación sobre qué hacer después de un cargo de DUI/DWI. Cada caso es único y nuestra prioridad es proporcionar información esencial para ayudarle a navegar este desafío.
Las consecuencias de un cargo de DUI/DWI
Las leyes en Arkansas incluyen límites y reglas (enlace en inglés) para la prueba de niveles de alcohol en la sangre, como la suspensión o revocación de licencias de conducir y sanciones por operar un vehículo bajo los efectos del alcohol. Estas penalizaciones pueden agravarse si esto resulta en un accidente, daño a la propiedad o una tragedia.
Consentimiento implícito
Arkansas tiene lo que se conoce como una ley de “consentimiento implícito”. Esto significa que solo por operar un vehículo en el estado existe el consentimiento a un análisis de sangre, aliento u orina del conductor para detectar alcohol, drogas u otras sustancias controladas. Si se niega al análisis químico, sus privilegios de conducir pueden ser suspendidos.
Licencia restringida
Las leyes en Arkansas permiten una suspensión automática de la licencia del conductor tras una primera ofensa. Una primera condena puede resultar en la suspensión de su licencia de conducir por seis meses. Sin embargo, si se permite un dispositivo de bloqueo de encendido (por parte de la Oficina de Servicios para Conductores) se puede emitir una licencia restringida.
Esta licencia restringida limita el trayecto desde y hacia el trabajo, la escuela o un programa de tratamiento de abuso de sustancias. Un dispositivo de bloqueo de encendido requiere que el conductor sople el dispositivo para medir su nivel de alcohol en sangre. Si este supera cierto nivel, el vehículo no arrancará.
Contacte a un abogado
Estas leyes pueden resultar confusas. Si ha sido arrestado o acusado, debe consultar a un abogado con experiencia en estos casos para asesorarlo sobre sus derechos y responsabilidades.
Enfrentar un cargo por manejar en estado de ebriedad es una experiencia abrumadora, pero no está solo. Con la asistencia de un abogado puede abordar este desafío legal con tranquilidad y confianza.